jueves, 7 de julio de 2011

THE END.

Y, ¿ahora qué, todo se acaba? Que triste. Pero más triste soy yo, que lo creí distinto esta vez. Tanto creer, tanto soñar, mira que soy idiota. Por creer en que todo saldría bien, por pensar, que tenía amigos de verdad. Amigos que demostraran que me querían por algo más que el interés. Pero no, esos son los que realmente se cuentan con los dedos de una mano, ni siquiera se necesitan las dos. Y los demás son los que se interesan  por ti un día y al siguiente te pegan la patada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario