viernes, 27 de diciembre de 2013

Heal

Era lo más parecido a un día gris. 
Revolución y tornado en la voz más dulce que jamás escuché. 
Sus ojos amarillos como el sol desprendían vida, aunque solo cuando las pupilas no los convertían en tristeza y oscuridad. Y aún así, juraría que jamás había visto algo tan increíble.
Era un invierno constante y desconcertante que vivía enamorada del otoño. 
Creía en las miradas y no en las sonrisas. 
Odiaba ese pequeño rayo de sol que salía antes de la gran tormenta. Y yo que siempre pensé que era ella.
Era fría como el hielo, pero sentía fuego cada vez que me rozaba. 
Nunca supe que pensaba, por qué se perdía entre la muchedumbre para estar sola, por qué se mordía el labio cada vez que iba a sonreír, como si quisiera evitarlo. Nunca entendí nada de lo que me quiso decir al mirarme, pero aún así me traía de cabeza. 
No quise darme cuenta, de que uno no puede enamorarse de la tristeza, aunque sea más bonita y apetecible que la propia luna. 
Que la quise, por cada rincón de su pequeño cuerpo.
Que puedo decir orgulloso que conseguí conocerla un poco más de lo que muchos llegaréis a hacerlo nunca. 

martes, 10 de diciembre de 2013

Balas

Te busqué más allá de las noches de alcohol y porros. 
Tuve tres millones de oportunidades de quererte con todas mis fuerzas y lo hice en cada una de ellas aún sabiendo que tú, tan solo querías parte de mí. 
Yo estaba entera, hasta el día que decidiste que el amor no merecía la pena y que yo, tan solo era una soñadora más, una enamorada de la vida y la poesía que daría lo que fuese por tener la más remota sensación de magia. 
Todavía sigo pensando en tus manos, recorriendo cada milímetro de mi piel. Y en tu voz, perdiendo segundo a segundo el sentido. 
Conocías cada uno de mis movimientos, de mis susurros y mis gritos, de mis risas y mis llantos. Me conocías tanto que no tenías ni el más mínimo miedo de reconocer que lo hacías mejor que nadie. Y aunque no te imaginas cuanto duele reconocerlo, cada día me calabas más y más. Y es que mientras que tú me ibas ganando yo me iba perdiendo lentamente. 
No sé decirte si lo que siento es vacío o ganas de ti. Si el amor es una trampa en la que caí rendida y jamás supe levantarme. Si algún día recuperaré esas ganas de sentir por alguien lo que fui capaz de sentir por ti. 
Porque tengo los cojones de no mirarte por no tenerlos de perderme de nuevo en tus ojos. 

martes, 3 de diciembre de 2013

Fuimos más fuertes que la propia fuerza de la gravedad.

"Y terminamos rebañándonos, 
relamiéndonos los dedos 
en señal de rendición."


Sé que recuerdas cada esquina de mi cuerpo en todos los formatos. 

Puede ser, que cierto día viajaras por mi mente a tus anchas derrumbando y construyendo todo lo que te venía en gana. 

Conozco en tus ojos ese brillo de felicidad, pero también el de tristeza. 

Abandonar la partida no supone ni ganar ni perder, solo abandonar. Abandonarnos. 

Luego tu mirada volverá a hacer de las suyas, viajando por recovecos de mí que ya te prohibí una vez. 

Y una vez más, haremos de este diciembre un nuevo octubre, aunque esta vez sin caricias ni palabras bonitas. Sin magia. 

Volver significa retroceder. Revivir sin reinventarse. Y a mí hace tiempo que eso ya no me sirve de nada. 

Pasará el tiempo y seguirás con tu estúpida manía de que es el tabaco el que me hace daño y no tú. Y seguirás prometiendo amaneceres que jamás llegarán, con la picardía del que sabe que una debilidad es un castigo del que jamás te puedes librar.


sábado, 23 de noviembre de 2013

Entre susurros y gritos.






Me hablaban de sonrisas perdidas por aquellas calles
donde solías llevarme a ver atardeceres,
entre copas de más.

Pudo ser que en un día nublado 
no conseguimos ver todo aquello
a lo que estábamos acostumbrados.
Pero no lo fue.
La única niebla que recuerdo 
apareció cierto día trece entre nosotros,
y eso que yo, puedo ser de todo
menos supersticiosa. 

La lluvia es un acto reflejo
de cada gota de sudor 
que desperdiciamos en discutir,
cuando en realidad
solo necesitábamos amarnos. 

Pudo ser, que alguno de los dos
se cansó de compartir labios, 
de compartir besos con bocas ajenas,
con salivas agridulces 
y con mucha falta de magia. 

Susurraría mil veces 
que el amor es aquello 
que sientes que sin ser tuyo
jamás podrías dejarlo ir. 

Pero también gritaría, 
también te gritaría, 
que el odio es aquello
que uno logra conseguir 
a base de dolor, 
y amor caducado.

miércoles, 30 de octubre de 2013

Cruzando la línea de lo inestable.

Mariposas que no revolotean.

Silencios,
que han dejado de significar vacíos,
para volver a ser el griterío 
propio de la cabeza.

Dejé de sentir el calor propio
de la cercanía de dos personas
que se desean de la forma más pura.

Los escalofríos,
volvieron a invadir los momentos
en los que trataba de salir del paso,
de sobrevivir. 

Dicen, que la vida es eso 
que pasa mientras tú,
estás ocupado en hacer otros planes.
Como el tiempo, 
que no espera. 

Y ya sabes, 
volveré a caer en la tentación
de soñar con imposibles 
por salir de la rutina, 
de no perderme en tus ojos.





martes, 29 de octubre de 2013

with a "fuck you" on the front

By now I have no idea of the numbers that I have deleted .  Of the lives I've destroyed . From the times I've started from scratch, tears are eroding me those shiners that are becoming routine. I can’t keep track of the intense moments that are leaving scars. The number of new lingerie sets after each final.

I had bought new pens for new memories, had bet as ever, still have everything. I stopped what I had always wanted to continue looking when I swore I already had found. I changed lanes and went in the opposite direction without realizing it was against a wall, the kind in which I support in the bathroom when my legs fail me and I turn into hate and waterfalls.


I continue collecting reasons. I will paint my lips red, I won´t let you knock down the little sanity I have left, with the desire of living that is renewed every morning . You know where I am, at the end of the street. But the alley is walling, and in less than a week it will be a blind alley.

domingo, 20 de octubre de 2013

Esperas la colisión en cualquier momento.

Sigo guardando todas aquellas cartas que te escribí, aún sabiendo que no te las enviaría jamás. Aún sabiendo que ahora las cosas se mandan por whatsapp. Esa fría e insólita aplicación por la que solías mostrar como te sentías.

Cobarde.

Echo de menos tus párrafos sin sentido, de los cuales podía sacar mil conclusiones. Aunque lo cierto es que solo hablábamos para discutir. 

Tenías razón, nada merece la pena menos que el intento de un tú y yo. A mí me gusta discutir y a ti las cosas fáciles. 

Estoy pasando por el mismo desencanto de todos los meses. Por eso de vivir como si fuese domingo el día a día. Por eso de saber que esta vez es la última y no volverás. Solo que esta vez espero que sea verdad. 

Nunca fui la buena, con la que debías quedarte. Creo que en realidad nunca fuiste mi primera opción, y yo, bueno yo nunca fui la mejor opción. 

Sigo guardando aquello que no tuve cojones de mandarte. Aunque me desprendí de aquello que me ataba (y nunca mejor dicho) a ti aquella última noche. 

Siento las malas caras y mis pocas ganas de encontrarte. He querido dejar de buscar.

miércoles, 16 de octubre de 2013

Quedan restos en mi armario.

Llamé a la puerta unas treinta veces, sin obtener ningún tipo de respuesta. 
¡Vamos, te escucho respirar detrás de la maldita puerta!

Había recorrido tantos kilómetros para estar allí que no podía volverme a casa con las manos vacías. 
Pegué mis labios lo máximo posible a la puerta y entre sollozos susurré que te necesitaba. 

Sé que oír mi voz podía llegar a quemarte. Y ahí estaba, capaz de hacer lo que fuera por conseguir que me abrieses, y lo sabías. 
Saqué un papel y un boli del bolso y como pude escribí, 'Venga idiota, por los viejos tiempos'.
La colé por la rendija de la puerta y a los pocos segundos comenzaste a darle vueltas a las llaves. Yo solo quería abrazarte, joder. 
Antes de que terminara de abrirse del todo ya te escuchaba diciendo que no te llamase idiota.
 
Podría contar todas las carcajadas que se escucharon aquella noche, el alcohol, cada una de las cosas que te confesé, e incluso las sonrisas de tontos que mantuvimos desde el principio al recordar un amor que como todos se acaba. 

miércoles, 9 de octubre de 2013

17 Days

The thumb stroking the screen, recognizing your name among all of them, the one you have chosen, not the one you have been awarded, that I have not used it out loud yet. I'll use it only when I have some news, when I need to talk seriously, when I get mad or cry when we do cry, when I remember you. 

The green key, the touch of the glass. At first a whisper. I curl into myself, legs encased in the chair, vulnerable to limits I didn´t think that I would afford.

Tones, infiltrating on my ear in slow motion. One... two... three. A second of silence, four, five.

And then, when I feel the other side, two words, nine letters, a space, that make me feel at home. Your voice. Tickling inside. The pauses, silences, sighs.

The gesture, as usual, and vice, to bite my lip not to mention more, to kiss my knees on impulse, to close my eyes to keep you better. And you, reading me poetry, one after another, listening me breathing between your phrases, how each verse stirs me in the ribs.


The open window, my fists enclosing the sleeves of my jacket, like a child dead of shame, tenderness.

lunes, 30 de septiembre de 2013

We jumped, never asking why.

Lo jodido de pensarte es sentirte. 
Sentir la soledad y las putadas.

Querer es bonito cuando no duele,
cuando no sabes que lo haces. 

Cuando queriendo dejar de hacerlo 
se te anudan las mariposas, 
y la cabeza empieza a dar mil vueltas,
empieza a ser un martirio,
no amor. 


Dejé de sentir el día 
que no escuchaba tu voz (ni me la imaginaba), 
cuando dejaste de aparecer (también en sueños). 
Dejé de sentir en todos los aspectos posibles, 
por si te preguntas la frialdad repentina. 

Cuando te la juegan una vez, 
tú no te la juegas una segunda. 

Aún así mírame, 
sigo intentando ser (a veces)
eso que esperas, 
aún sabiendo 
que soy mucho más. 


Lo bueno de conocer 
a alguien tan bien, 
de tenerte tan calado,
es que cazo mentiras 
(y no mariposas)
hasta antes de que las sueltes.


Cuando alguien es tu debilidad
lo peor que puedes hacer
es dejarle conocer
al resto de ellas. 


sábado, 21 de septiembre de 2013

Distancia de seguridad.

El verano había pasado 
con su característica rapidez 
y dejándome muy mal sabor de boca.

La sangre alterada de la primavera 
había llegado hasta él para todos,
menos para mí.

A mí, me recorría 
un frío infernal por las venas. 
Más característico 
de mi querido otoño.

Que esperáis encontrar en mí...
No lo haréis. 

Mi diablo interior, 
cada día más externo.

Mi coraza, 
cada vez más fuerte.

No me voy a justificar, 
ni a decir que cambiaré,
porque no lo creo. 

No me pidáis que sea clara, 
porque no me gusta serlo. 

Con lo bonito que es descubrir a alguien. 

Por las cosas fáciles 
se pierde el interés.

No sé si alguna vez de verdad 
me descubriste, o no.

Solo sé que ahora ya,
no quiero ser descubierta.



miércoles, 18 de septiembre de 2013

Lo que nunca y siempre aprendí, hoy se vuelve contra mí.

Recuerdo que, no hace mucho tiempo
solías pasar horas contando(me) lunares.

Conozco tu vicio por aquellos 
que se pierden por mi pecho.
Y sé, que te gusta besar 
a los que se esconden 
cerca de mi ombligo.

Hace tres meses, veinte días, 
y ocho horas, que no los cuentas.

Yo, intentado encontrar tu voz
en las cuerdas de la guitarra, 
acabé perdiéndome más.

Ahorcarme entre las cuerdas de ella
es más bonito que hacerlo entre tus mentiras.

Dicen, que no hay mejor sonrisa
que aquella que sale mientras besas.

Duro es perder, pero
más duro es ganar
y no saber el qué.







martes, 10 de septiembre de 2013

Que mi bandera de pirata puede esperar para ondear, que tu tesoro no lo tengo que robar.

Supe que algo estaba cambiando,
me empezó a atraer más el otoño
que la primavera.

Prefería ver las hojas caer
y el rugido que emitían al ser pisadas, 
que el ver florecer.

Quizá, me di cuenta,
empezaban a gustarme más los finales
que los comienzos.

La seguridad, pensé. 

Los finales son precisos,
los comienzos precisan sonrisas.

Y de esas, 
últimamente,
sabía muy poco. 




 




Las cuatro patas de mi cama pueden llegar a soportar toneladas de bipolaridad. Sabemos que mueres de ganas de que acorrale con los dientes los salientes de tus caderas. 
Y me suplicas que lo apague, que no son horas de fumar en la cama, en la misma cama en que también me confesaste que tienes miedo de las luces y de que te deje caer, de que me empieces a querer.



sábado, 31 de agosto de 2013

Las mejores historias son aquellas que no son escritas.

"Why? Help me."



Eres ese dulce sabor de boca cuando todo se volvía amargo. 
Mírame, no soy ni parecida a lo que era a lo que fui, y aún así sigues dándome la espalda. 
No niego que las demás sean mejores, pero eh, que yo soy yo y eso no lo cambia nadie. 

Eres la tentación en la que siempre he caído y recaído, y de la que intento salvarme (sin mucho éxito). 

Creo, que deberías saber el pánico que genera que leas las líneas que te escribí aquella noche, entre odio (y el recuerdo de muchos besos).

El cariño se esfumará (espero), pero tú quizá no, o sí. 

Estoy atada a manos y pies a una historia que nunca lo fue y quizá por eso me guste(s) un poco más cada vez.

Te prometo que no habrá detalles bonitos, ni besos, ni dormiré a tu lado nunca más. 

Mañana seguramente cambie de opinión, pero esta noche déjame ser un poco hija de puta, hacerme la dura y pasar de esos ojitos. 




Maybe it´s true,
that you and I
We were born to die

jueves, 29 de agosto de 2013

Vico

Perdóname, por prometerte cosas que no iba a poder cumplir. 
Prometí estar bien, y dejar de llorar, por ti, por cada noche que has pasado aguantando mis malos ratos.

Lo siento, pero no soy capaz de cambiar. Sabes que soy impulsiva y que caigo en las dos primeras palabras bonitas. Sabes que he confiado en gente que me ha fallado a los dos minutos y que como una tonta sigo ahí para ellos. 

No recuerdo el día que te conocí, pero sí cada momento en el que has estado a mi lado, y las veces que fallándome a mí misma te he fallado a ti.

Lo que darían muchos por tener a alguien como tú en su vida. 

He vuelto a Madrid y todo se ha vuelto turbio. 

He tomado la decisión más jodida sin tu ayuda y sé que estarás orgullosa de ello. Aunque esta vez no te prometo que vaya a estar (salir) bien. 

Voy a dejar de no dormir, para que no vuelvas a repetirme que no se puede ir por la vida sin fuerzas y con ojeras hasta los pies. 

Gracias por haberme abierto los ojos siempre, gracias por los helados a las tantas, por confiarme lo más importante y bonito de tu vida y dejarme ser parte de él. 

El tiempo todo lo cura y me curaré, y eso sí que te lo prometo, porque sé, que pase lo que pase te tengo a mi lado, aunque aún nos separen tantos kilómetros. 


martes, 20 de agosto de 2013

Siempre me quedará (tu sonrisa).

A día de hoy, hay demasiadas cosas que todavía no sabes (aunque las haya dejado claras).
No sabes, bueno, no te has debido dar cuenta que el tiempo pasa, y para bien o para mal siempre hace su efecto.
La distancia es muy puta cuando alguien te importa de verdad, y eso es algo que tú, no entiendes, porque todavía no te he visto mirar más allá de tu querido ombligo.
He defendido a la persona que conocí en situaciones surrealistas, aunque, claro está, me equivocaba. No me había percatado del hecho de que las personas cambian, y por desgracia, no siempre a mejor.
Sé todo aquello que dirías para defenderte, que yo no he sido para nada ninguna santa, y es cierto, no lo soy. He pedido perdón cuando me he equivocado y he hecho daño, cosa que los demás no sabéis hacer.
Lo que no voy a hacer, es pedir perdón por sentir, por querer tener a alguien que me valore lo suficiente cuando me tiene y no cuando me pierde. A mí lo de echar de menos me la suda, porque yo no echo de menos si no quiero, yo reacciono y hago que eso cambie.
Todo lo que dije o sentí por ti fue cierto, aunque te duela verlo. Eras todo y más, y repito, eras.
Te he querido y te guardo un gran cariño, que sé, que siempre quedará ahí. Pero sé que sería prácticamente imposible enamorarme de nuevo de ti.
No me gusta la gente que hace daño a personas a las que quiero, y tú, eres alguien a quien quería que hace daño a personas a las que quiero, y claro, mala combinación.
Algún día te darás cuenta de las cosas verdaderamente importantes, a parte de las que sé que sabes y valoras y por las cuales siempre te he admirado. Pero hay más. Siempre hay más. Hay cosas que piensas que son problema tuyo pero que incumben demasiado a los que están a tu alrededor, sobretodo a aquellos que te quieren. Pero eso es algo que algún día comprenderás y espero que no sea muy  tarde.

No sé si me leerás, pero si lo haces,  cuídate por favor. Siempre me ha gustado verte sonreír y no sé, no me gustaría enterarme de que dejas de hacerlo. 

sábado, 27 de julio de 2013

Que no se pierdan las malas costumbres.

Que duro es creer en el amor, o en aquellos imanes de los que tanto me gusta hablar.
Creí, por cuarta vez, que quizá esta fuese la oportunidad definitiva.
Creí (y llámame tonta por hacerlo) que esta vez tendríamos la madurez suficiente para dejar atrás los celos, aclarar los problemas del pasado y avanzar.
Y como estaba diciendo, creí, pero una vez más me equivoqué.
Quizá debería dejar de creer, de llevarme todo lo importante por delante para retroceder. Porque ya debería haberme dado cuenta que hago daño a mucha gente, pero que sobretodo me hago daño a mí.
Es muy fácil tener la ilusión de que las cosas han cambiado, que esta vez (repito, cuarta) la magia volvería, y hasta el amor, quién sabe.
Bueno pues para dejar todo claro soy una ilusa, pero una ilusa gilipollas.
¿Alguna vez habéis sentido que os estampabais contra un muro una y otra y otra vez? Porque es mi día a día.
Dicen que por las mañanas se ve todo más claro, pues yo, hace aproximadamente un mes que no sé lo que es ni la claridad ni el buen humor mañanero.
Llamadme gilipollas (que yo ya estoy muy harta de hacerlo) pero le sigo teniendo en favoritos aunque dejé de seguirle hace mucho tiempo.
Me gusta saber qué hace con su vida. Mejor dicho, me gusta saber que chica ronda a su alrededor (como una hiena ahí, queriendo algo que no le pertenece, algo dolorido, sangrante, buscando carne fresca),  (alguna guarra seguro). Vale ya paro, puede que algún día haya alguien que me de mil vueltas, pero no es algo que me haga especial ilusión (yo no he sabido ver esas mil vueltas en ningún otro).
Y volveré a los imanes, porque (por desgracia) son la explicación a todo. Los polos opuestos no siempre se atraen, y por mucho que me joda, los imanes también pueden llegar a repelerse.
El imán de mi vida (también podría llamarle amor, pero eso hace mucho tiempo que no lo siento) tiene nombre, apellidos, y a veces demasiado orgullo, le he llegado a odiar más que a nadie en este mundo, pero en el fondo mato si le pasa algo. El caso, yo quiero desimantarme, de verdad, por nuestro bien, pero que alguien me diga cómo se hace eso.
No sé lo que me deparará el futuro (en realidad, tampoco quiero saberlo), pero sé que cada vez que alguien quiera saber algo de mí, en el fondo sabrá de ti. Porque soy una mezcla entre mi yo anterior, ese nosotros, y mi yo después de ti. Y en el fondo, me siento orgullosa de esa mezcla. Nunca me gustó el tema de olvidar, sobretodo algo que te ha cambiado.

Así que pase lo que pase, depare lo que depare el futuro, seguirás siendo parte de mí. 

sábado, 6 de julio de 2013

Y tuve que girar más, hasta hundirme, para recuperar la noción del tiempo.

En un segundo lo tienes todo, y al siguiente...

Las cicatrices están ahí para que recuerdes el dolor, los fallos, los agobios y hasta los besos. 

De fondo suena 'La chica del tirso' en directo.

Dicen que alguien solo vuelve por revancha, por recuperar lo que es suyo. La clave está en que malinterpretamos lo que es suyo. No vuelven porque quieran volver a verte sonreír, vuelven por orgullo. Para dejarlo otra vez por las nubes, y a ti por los suelos. 

Quizá es cierto eso de que por mucho que los caminos se bifurcan, vuelven a cruzarse en el punto más inesperado. 

Que lástima que yo ya no quiera cruzarme contigo.


Ya no importa que haya otras, pero si que vuelvas a mí, así que no lo hagas. 

A ti hace tiempo se te acabaron las excusas, a mí, la paciencia. 

No hay nada más bonito que los recuerdos felices, y ¿sabes qué?, prefiero quedarme con esa imagen:

Tú y yo en el último vagón de la línea nueve, a las siete de la mañana, abrazados. 

Y esta vez de verdad, es la última vez que te escribo. 





Apuntoveinte

El ruido de los tacones, ceniza que cae al suelo, corazones que palpitan deprisa al escuchar la canción que les recuerda a tan bello momento, risas de fondo, gritos ahogados en el vaso de los últimos cubatas que se sirven, palabras que se susurran al oído  Ilusiones y esperanzas que recorren el aire esperando a ser cumplidas. Cristales rotos en el suelo y botellas vacías en la esquina de aquel bar. 

Es domingo por la tarde y repasas la noche anterior, al hacerlo quisieras borrar algunos momentos. Momentos que si no hubieras consumido esa cantidad de alcohol no hubieran sucedido. Otros momentos los hubieras prolongado incesablemente hasta que te cansaras de ellos pero, como nunca te hubieras cansado de esa sensación, permanecerías así eternamente.
Y otros momentos que te gustaría haber vivido pero que no lo has hecho, sin embargo, ya es tarde para lamentarse. 

domingo, 23 de junio de 2013

Nada más lejos de lo que vi con mis ojos.

No me había fijado nunca en esos ojos, hasta que vi, como segundo a segundo se dilataban, cambiaban lentamente al ritmo que él daba calada tras calada.

Y fíjate, que yo odié toda esa mierda día tras día, pero en ese momento me encandiló.

La magia en las pupilas. Volviéndome a jugar una mala pasada. 

Nunca había visto unos ojos tan cerrados y a la vez tan expresivos y brillantes.

Y ahora, tanto tiempo después, puedo reconocer, que el rojo de esos ojos cada día me volvía más loca. 

Ya ves, que de vueltas da la vida, hoy ya ni me pierdo ni me encuentro en ese iris. 










domingo, 2 de junio de 2013

Heridas de guerra.

Y qué duro eso de no querer volver a sentir nada por nadie. 

Mente y alma de hielo.

El fuego calienta pero ya no quema.

El amor no existe, ilusos.

Si quieres pido perdón, por tener razones para tirar todo por la borda.

Pero si quieres lo hago.

Cuando entendáis lo que es ver como la gente se jode la vida venís y me lo contáis. 

Sobretodo cuando no podáis hacer nada para cambiarlo.

Los cambios siempre dan miedo.

Cuando una persona es cambio constante da pánico.

Así que sí, puedo ser todo lo desastre y gilipollas que queráis pensar, pero doy todo lo que puedo de mí por los demás.

Y joder, ¿cuántos harías lo mismo? 

Que yo no quiero que el tiempo ponga a cada uno en su lugar, porque muchos acabarían muy jodidos.

Me has dejado sin ganas de nada, sin fuerzas ni ánimo.

Pero yo que sé, alguien me salvará. 

Mientras a ti, espero que te vaya todo bien.


lunes, 20 de mayo de 2013

Comprendes con los años, lo aprendes si hace daño.

Fui todo aquello que ahora odio.
Quise con todas mis fuerzas y perdí. 
Era capaz de apostarlo todo sin pensarlo dos veces.
Caía con las dos primeras tonterías. 
Pensaba que ser débil era mi mayor debilidad, y sé que eso me hizo fuerte.
Si me hablabas de orgullo, bueno, eso no existía en mí. 
Fui feliz, para ser sinceros, pero de esa felicidad ciega.

Quizá perdí por haber cambiado.
Por no quererlo apostar todo.
Por no seguir ciega.
Que ahora me quedo con lo bonito, pero ya no olvido nada.
Las puñaladas por la espalda me las quedo grabadas en cicatrices como si de tatuajes se tratara.
Ya no duele, lo que antes mataba.
Ya no me importa callar bocas, ya no importa lo que pienses.

Lo bueno de controlar mis sentimientos, es que así no siento nada por nadie.
Así no se sufre, y eso es demasiado tentador.
Sé lo que vas a decir de que no sentir es una mierda, pero mírame, he llegado a este punto por sentir demasiado. 

Cuando pienses en olvido acuérdate de mí, de verdad, porque el olvido no existe. 



domingo, 12 de mayo de 2013

Por verte sonreír, he vuelto yo a caer.

Que sinceramente nunca voy a dejar de luchar por ti, ni el día en el que me dejes de querer. Que solo quiero siestas contigo, desayunos sin desayunar... Es un te quiero de los de llorar, porque no te puedes explicar como una ratilla de 1'70 de 17 años pueda ser la razón para sonreír las 24 horas. Nuestra primer beso con sabor a Negrita, nuestra primera ducha, el día que quedamos en los bomberos y me escondí para que no me vieras y te picaste, luciernaga, el viaje a Londres, los abrazos por el Almazán,  las llamadas desde Granada, nuestras pestañitas...      Encontrarte ha sido lo mejor que me ha pasado en la vida, poder quererte hasta sentir que me quemaba por dentro, el regalo diario de verte sonreír. Quizás no tenga fuerzas para sufrir, y aún así siempre las tendré para quererte.

sábado, 11 de mayo de 2013

It´s time.

Maldiciendo 
cada  rincón de Madrid
en el que te besé-


Te llamaré huracán, llegas, desordenas todo y te vas. 

Que fácil y bonito sería que nunca cambiases, que fueras siempre el mismo.

No entiendo por qué desapareces cuando más te necesito, cuando más te deseo, cuando he encontrado a la persona perfecta.

Has hecho que deje de creer en los te quieros y en los besos a quemarropa. 

La poesía no me llena desde que te fuiste, y es que tú eras poesía. 

Quizás te fuiste para no doler, pero creas dolor a mi alrededor. 

Eres un egoísta. 

Ojalá nunca hubieses aparecido en mi vida cabrón, porque conocerte fue mi puta ruina. 

Así que Querido Amor, ya que te has ido no vuelvas. 

Le estoy pillando el encanto a esto del corazón frío como el hielo. 




viernes, 26 de abril de 2013

De lirios y de éxtasis.

'No mientas pequeña,
 a ti lo que te gusta 
es estar al borde 
del precipicio'



Quizás sea así, pensé. 
Sabía perfectamente como controlar mi vida hasta el punto de no llegar nunca a caer. 
Tal vez viva en un continuo juego a vida o muerte, pero ¿y lo dulce que es el momento en que pisas tierra firme?
La vida te pone cosas que luego te quita. Te enseña el desamor para que entiendas realmente el significado del amor.
No sabéis lo jodido que es ser una soñadora. Y a veces, me canso de tanta poesía. 
Cada día algo nuevo.
Hoy no estoy para bromas, hoy el precipicio es más atractivo que nunca. Si de verdad esto merece la pena, te espero abajo. 




martes, 23 de abril de 2013

Haciendo un pulso cabeza y corazón.

Me pidieron que hablase de motivos para no dormir. 

Por amor, pensé.

Pero no, por amor se sueña. 

Por desamor, recapacité.

Cada noche busco resquicios de sonrisas perdidas, de vasos medio llenos, de oportunidades por llegar.

Quizás la noche es utilizada para buscar salidas, o entradas quien sabe. 

Yo lo único que quería era descarrilar ese tren 'que solo pasa una vez en la vida', y quedármelo para mí.

La noche aclara todo aquello que el día oscurece. 

Puedes clavarme más la espina o arrancármela, tú decides.

La noche hace más fuertes nuestras debilidades. 

Salí corriendo tantas noches que acabé por darme cuenta que a quien no quería perder era a mí. 

El tiempo no cura, pero calma. 

Y a veces, depender de alguien, es bonito. 

miércoles, 10 de abril de 2013

Adoro ser un fallo, un problema, una debilidad. Un precioso error de la naturaleza. 

Adoro gritar, llorar y llamarte gilipollas mientras me muero por comerte la boca. 

Adoro reír aunque te joda, suspirar cuando pasas cerca y bailar hasta las tantas con un par de amigos y varias copas de más.

Adoro sentirme libre y a la vez protegida. 

Increíble es el roce de manos, el cruce de miradas, perderse entre sonrisas.

Increíble es el viento empujándome hacia ti o la lluvia pidiéndonos refugio en mi cama. 

Increíbles son las imperfecciones, eso que nos hace diferentes. 

La mala hostia, el buen humor, las caricias, los gestos.


lunes, 1 de abril de 2013

En donde estés, te espera.

Llevo viéndole soportar la distancia más de 7 meses. Con sus altibajos, con sus 'estoy bien, no te preocupes'. Con toda la fuerza que saca hasta de debajo de las piedras. Pero por suerte o por desgracia le conozco tan bien como si de un hermano se tratara. Y sé que en cada 'estoy bien' iba escondido un 'la echo de menos'. 

Podría decirte que para no pasarlo mal ha intentado olvidarte. Pero mentiría. Ninguna jamás ha llegado a ser ni la mitad de lo que eres tú. Ni nadie le llenará jamás el corazón como tu has sido capaz de hacerlo en estos años. Y ¿sabes por qué? Porque él eres tú, estás en cada rincón de su cuerpo, no hay hueco que no hayas sido capaz de llenar. 

Me he identificado tanto contigo que me duele llegar a este punto en el que veo en sus ojos por primera vez un dolor que te aseguro jamás había experimentado. 

Te quiere, mucho más de lo que imaginas. 

Siempre me has gustado para él, porque le quieres, y le has hecho sonreír tantas veces... 

Errores cometemos todos, pero ¿sabes cual sería el peor de todos? , tirar la toalla, dejar de luchar. 

No os rindáis y nunca intentes buscar en otro lo que solo te da UNA persona. 


Nos sobran los motivos.

Mira, sé todo lo que me cuentas. Que si le quieres, que si el amor es lo más increíble del mundo, que te enamoraste hasta de sus defectos, que el mundo no irá más allá de él. 

También sé lo que me dice ella. Que le odia, con cada pedazo de corazón con el que le amaba. Que daría todo por no volver a cruzarse con su mirada. 

Lo sé, lo he vivido. Y no funcionó la verdad. Ni el odio, ni el amor es la solución.

¿Qué tal si empezamos a dejarnos llevar? 

Mira, la vida es tan bonita que dejarla pasar mientras ves a alguien marchar es la mayor gilipollez que se puede hacer. No sirve de nada anclarse en el pasado, ni querer solucionar el futuro antes de que llegue. 

Es maravilloso el poder querer a alguien, olvidar el dolor y centrarse en esas mariposas que tanto nos gustan a todos o de esos momentos paseando por cualquier ciudad a cualquier hora del día. No te hablo de amor, ¿para qué ponerle nombre a un sentimiento?, te hablo de querer a alguien con todas tus fuerzas. De disfrutar el día a día con quien quieres. 

Hablo de salir en medio de la tormenta en vez de esperar a que salga de nuevo el sol. 

Ya ves, como cambian las cosas. Aunque una cosa siempre es igual; el mundo, sigue girando y no se parará a esperar a nadie. 

Por eso decidí girar con él y con los que quiero. Los que lo merecen y los que no. Que más da. Hay momentos malos, pero nunca son capaces de superar a todos los buenos.

He encontrado mi lugar, está en cada una de las sonrisas de aquellos a quien quiero. 

jueves, 7 de marzo de 2013

J

Un beso, otro y otro más.  
Enlazar mis piernas a las tuyas, mis brazos a tu cuello, los tuyos a mi cintura. 
Desayunos con cosquillas, siestas con caricias.
Que bonito es todo cuando te ves reflejada en esos ojos. 

No me sueltes nunca.


martes, 5 de febrero de 2013

Tú en mi cuello, no quería nada más.

Te veo aparecer y se me para el mundo. 
No quiero sufrir más.
Relaciones enfermizas de personas que se quieren.
No sé ya lo que es querer. 
Lo siento.



sábado, 2 de febrero de 2013

En ese día gris en el que no me alegras.

Dudas. Solo hay dudas. 
No sé en que momento me convertí en quien soy ahora mismo, pero estoy muy orgullosa de mí.
Hace tiempo que no cometo errores, me dejo llevar y todo suele salir bien.
El problema es cuando un día cualquiera me entra la vena solitaria, esa que tenemos todos. 
Solo me apetece estar sola y recordar. 
Y mi nuevo yo es más maduro y solo recuerda lo bueno.
Los malos momentos duelen, abren heridas y hacen que derrame una lágrima tras otra. Y, ¿para qué? Antes no me importaba llorar si al levantar la cabeza ibas a darme un beso y decirme que todo iba a ir bien, pero ¿ahora?
El alcohol y sus consecuencias han dejado de atraerme. 
El día que sobrio digas lo que sientes me tendrás para lo que quieras y necesites, hasta entonces no te creas que voy a volver.
Luché tanto que me quedé sin fuerzas. 
Cuando el orgullo ciega da igual lo que hagan los demás por ti.
Te quiero, lo sabes de sobra. 
No hay peros cuando se quiere.
No juegues conmigo.
No soy de nadie.
Te quiero.
Nadie me ha hecho sentir como tú. 
No quiero recordar el último beso, quiero poder sentirlo de nuevo. 
El tiempo no ha hecho su trabajo.
Te quiero.

Por si me lees, buenas noches. 

miércoles, 16 de enero de 2013

Jugar con fuego, quemarse queriendo.

Sube las escaleras de dos en dos, la mochila demasiado baja, la cabeza demasiado alta.
Nadie fue capaz de decirle jamás de que pie cojeaba. 
Más fuerte que una roca, leal como nadie a quien vayas a lograr conocer. 
Su sonrisa aparecía iluminando nuestras vidas antes de que el sol comenzara a salir por el horizonte. 
Estaba para todos, a cualquier hora, en cualquier situación. 
No se conocía de ella debilidad ninguna, hasta que apareció él. 
Él, con su sonrisa, con sus ganas de cambiar el mundo.
Prometiendo bajar la luna, cuando es sol se pusiera. 
Le regalaba las noches y fundía sus días. 
Típica historia chica conoce a chico, se enamoran blablabla
Típica historia que siempre acabará mal.
Ella poco a poco fue dejando caer su cabeza, todos sabían que su debilidad tenía 20 años y poco a poco le estaba arruinando la vida. 
Sus sonrisas pasaron a ser lágrimas.
En su corazón solo odio.
Nunca quiso ser como las demás, y acabó como todas. Pero eso es otra historia.

martes, 15 de enero de 2013

Hoy me dueles. Y lo odio.

Por inercia voy perdiendo el sentido.

La mentira de 'dime que te fuiste para no doler' ha estado presente en cada uno de los segundos de mi vida desde que te fuiste. 
Para que te voy a mentir, te veo y la movida esta que me mueve se para, la izquierda de mi pecho.
Me gusta verte, me encantaría poder mirarte sin que lo supieras cuando sonríes. 
Ver que puedes ser feliz, que lo eres, que ya no me quieres.
Que el cielo ya no se pone negro para mí ni al verte, ni al recordarte. 
Antes de rendirnos fuimos eternos. 
La perfección más imperfecta. 
Estábamos locos, puede ser, pero nos queríamos. 
No me quieras nunca más, por lo que hice, por lo que hiciste, porque no quiero quererte más. 


lunes, 14 de enero de 2013

Ganarla, para perderse.

Sentimientos encontrados. Una boca buscando otra sin dirección ninguna, sin un claro destino
Dile que todo es una mierda pero que mañana harás que sonría. 
Dile que tras toda esa apariencia fría e inaccesible reside un resquicio de emoción cada vez que vuelve a perderse en tus ojos. 
Dile que tu mente se empieza a volver loca cada vez que la piensas. 
Dile, que tras cada discusión tonta la necesitas un poco más. 
Dile, que ser debilidad no es una traba, que es lo más bonito que te ha pasado jamás. 
Dile, que desearías pasar cada noche de este invierno frío enterrado en las mismas sábanas en las que ella se refugia cuando te piensa.
Dile, que el amor es una mierda pero que la quieres.
Dile, que es libre pero que se quede.
Y cuando le hayas dicho todo, demuéstraselo. 
Hazla reír cada mañana de tal forma que el sol pierda su protagonismo. 
Deja que se pierda en el océano de tu mirada cada vez que te piense. 
Bésala, haciendo que pierda el norte. El sur, el este y el oeste. 
Búscala por cada esquina para que no olvide que la necesitas. 
Rétala a batallas bajo sus sábanas y bajo las tuyas. 

No la hagas creer en el amor, pero haz que te quiera con locura.

domingo, 13 de enero de 2013

P de Premio.

Millones de personas en este mundo, diferentes, pero tan iguales. 
Tenía dos años cuando le vi por primera vez. 
Entre juego y juego fuimos creciendo. 
Con todo lo que ello conlleva. 
Toda niña tiene su diario, yo siempre le he tenido a él. 
Si tengo que darle las gracias es por saber todo de mí, y no salir corriendo. 
Siempre dicen eso de que la familia es la que te toca, que tienes que convivir con ella te guste o no, pero que a los amigos los eliges. 
Yo estoy muy orgullosa de mi elección. 
Llevo prácticamente 16 años a su lado y sigo sin conseguir enfadarme con él. 
Por estar cuando se me caía el mundo, por aguantar mis días malos. 
Por protegerme, por ser el mejor. 
Cambiamos los juguetes por pitis a media tarde. Los cuentos infantiles por libros de poesía. 
Pero nunca nos cambiamos el uno al otro. 
Seguimos pasando la mayor parte de nuestro tiempo juntos. 
Recibir un mensaje a las cinco de la mañana que diga: 'Pablo está dando la cara por ti, Pablo daría la vida por ti.' 
Eso vale más que cualquier niñato del que pueda llegar a enamorarme. 
Para mí, es mucho más que un amigo, es mi hermano. 
Es la mejor persona que he conocido en el mundo, con sus aciertos y sus muchos errores. 
Que nadie me pregunte si le quiero, porque eso se queda corto. 

Por ti P, por mí, y por toda la vida que nos queda por delante.

Nunca fui tu mejor opción.

He vuelto a pensarte, pero a diferencia de lo que solía pasar, hoy no ha habido lágrimas. 
El recuerdo de tus besos ya no sabe bien. 
Me sabes a rencor y odio, y el mundo es demasiado bonito como para quedarme prendida a recuerdos amargos. 
Las tardes que pasamos entre estas cuatro paredes han dejado de quitarme el sueño. 
Tus labios besando otras bocas, buscando otras princesas que te sepan hacer feliz. 
Yo, perdiéndome en otros ojos, más reales y sin dolor. 
Los recuerdos son bonitos a veces, pero cansan. 
El pasado va a perseguirnos hasta el último de nuestros días. Tienes dos opciones, vives de él siendo una triste figura en el presente con el corazón y la cabeza al otro lado, o aprendes a vivir con él a tus espaldas. 
Dos copas de más no van a hacer que vuelvan a cambiar mis sentimientos, puede que saquen más de una de mis imperfecciones. 
Pero también mi mejor sonrisa. 
Hace tiempo que no sé lo que es beber para olvidar. 
El olvido gana partidas, así que he decidido abandonarle. 
Soy más feliz viviendo a mi aire. 


"Somos frágiles, sometemos nuestro cuerpos a sobredosis de emoción y distancias largas que nos matan lento."