sábado, 6 de octubre de 2012

It hurts intead

No se puede hablar de amor si no te han roto el corazón antes. Igual que no se puede hablar de borracheras sin haber bebido. 
Dime cuánto tiempo llevas sin sentir mariposas, sin quedarte con esa sonrisa de tonto con la que solías mirarme nada más verme. Dime dónde están todos esos te quieros que escucharon mil veces estas cuatro paredes entre las que sobrevivo. Dime dónde están cada una de tus miradas, con esos ojos rojos y achinados tras del porro de después o el de despedida. Dime de qué sirvieron esas L de Love o de Weed. Dime si en algún momento te has visto reflejado en los ojos de otra como lo hacías en los míos y si solo han sido intentos fallidos de olvidarme. Dime qué todo es una mierda y que mañana volveré a sonreír. Dime a qué saben los besos de otras bocas después de los míos. Dime como se siente el placer sin amor. Dime qué el tiempo pasa demasiado despacio sin mí, porque no quiero pensar que me estoy volviendo loca. Dime si has sido capaz de tener la ropa de otra tirada por el suelo de tu habitación de una forma tan bonita como solía dejarla yo. Dime si alguien ha sido capaz de cargarse las escaleras de tu cama por tus jodidas cosquillas. Dime si te sabes de memoria todos sus lunares, como lo haces con los míos, y las escaleras que tienes que subir hasta llegar a casa. Dime si has soñado en ir a buscar a otra con la moto. Dime si te ves enamorado de otra loca que te sepa valorar, respetar y proteger. Dime que no me quieres, dime que tras todo ese orgullo no se esconde mi nombre en cada pensamiento. Dime que no deseas ver mi culo andando por tu pasillo. Dime que no eres un cobarde de mierda que piensa que la libertad es liarse con cien en una noche y no dar explicaciones. Dime que cada noche no me deseas a mí abrazada a ti. Dime que me has olvidado. Dímelo y te juro que me voy.

No hay comentarios:

Publicar un comentario